8 consejos para reformar tu casa por poco dinero

El miedo a no tener suficiente dinero para afrontar la reforma de una vivienda o la falta de tiempo paraliza a muchos propietarios a la hora de hacer un “lifting” a la casa. Pero es posible hacer pequeñas reformas que aportan grandes mejoras con poco esfuerzo y sin rascarse mucho el bolsillo: poner revestimientos vinílicos, pintura antihumedad, forrar los muebles de la cocina con vinilo brillante o mate, o pintar las paredes del baño con esmaltes sintéticos.

Con estos pocos consejos de woohogar.com puedes ahorrarte los gastos de la casa durante la reforma. Por favor, lea atentamente todos los artículos.

  1. Antes de comenzar la reforma, hay que analizar los puntos fuertes y débiles de la vivienda, como que el aislamiento, los conductos o la iluminación requieren una atención especial. También es interesante tener en cuenta la estética que se quiere dar y todos aquellos detalles que se buscan dentro de una casa. Para ello, es necesario elaborar un proyecto concreto, que se ajuste perfectamente a nuestras necesidades y presupuesto, y así evitar futuros errores. En el caso de que lo que queramos hacer supere nuestra capacidad para llevarlo a cabo. Es aconsejable pedir ayuda a un profesional. Es conveniente pedir un presupuesto detallado a varios profesionales y comparar precios. Aunque pueda parecer que la contratación de un experto encarece la reforma.
  2. En la actualidad, existen nuevos materiales que facilitan la remodelación de espacios, hasta el punto de poder evitar las obras por completo: revestimientos vinílicos, pintura antihumedad, materiales de PVC, etc., son algunos ejemplos con los que hoy en día se puede reformar una vivienda sin enfrentarse a escombros y obras interminables y costosas.
  3. La pintura es el instrumento ideal para dar un nuevo aspecto a las viviendas de forma económica y sencilla. Además con la pintura se puede mejorar cualquier estancia, haciéndola más agradable, dando luz o ampliando espacios.
  4. Uno de los inconvenientes que más preocupa a una vivienda de segunda mano es el estado de las tuberías. Si éstas son de cobre o hierro, las más antiguas, es conveniente comprobar tanto el caudal de agua como su estado. Si las tuberías son visibles, se pueden sustituir sin levantar el suelo. Una buena solución para renovar el aspecto de las tuberías exteriores puede ser pintarlas del mismo color que la pared o camuflarlas con un mueble alto que haga de parapeto para las tuberías verticales. También es
  5. Es posible regenerar el mal estado de las tuberías mediante soluciones que no requieren su sustitución. La más innovadora es aplicar una capa de resina especial, cubriendo el interior de la antigua tubería, de esta forma se crea una segunda tubería por la que circulará el agua libre de residuos metálicos.
  6. Dar un nuevo aspecto a la cocina y dejarla bonita y acogedora con poco presupuesto, es posible con estos consejos. Los armarios se pueden forrar con vinilo brillante o mate, las tiendas especializadas ofrecen una amplia gama de estos materiales que, combinados con los muebles antiguos, cambiarán por completo la estética de una cocina antigua. Lo mismo ocurre con las paredes, sustituir los azulejos es caro y engorroso, por el contrario, se pueden renovar pintándolas, aplicando un papel resistente o un vinilo especial que además cubrirá cualquier desperfecto.
  7. Una de las reformas más comunes y que más posibilidades presenta es la del baño. No hacen falta grandes obras ni gastos, podemos dejarlo como nuevo si tuneamos las paredes con esmaltes sintéticos o papeles y vinilos resistentes a la humedad. Para los suelos, existe en el mercado una buena oferta de pinturas y revestimientos que se colocan fácilmente sobre los azulejos e imitan todo tipo de materiales, además son más cálidos, fáciles de mantener y más baratos.
  8. El cambio de puertas y ventanas es uno de los apartados más costosos en la reforma de una casa. Si realmente están en mal estado, debemos plantearnos su sustitución. Si sólo es necesario dar un nuevo aire a las puertas, bastará con revestirlas. El semilacado es más fácil de aplicar con un rodillo y es incluso más económico. En cuanto al color, blanco o el mismo que la pared, representan un acierto seguro.
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