Aunque es una afirmación de lo más triste, está demostrado que al llegar a los 30 años, nuestro cuerpo empieza a envejecer, un dato que ha sido revelado por el catedrático de Fisiología Humana Francisco Mora. Jaime Miquel, ex director del Laboratorio de Envejecimiento de la NASA que a partir de esa edad nuestro organismo empieza a decaer.
Y es que, según el experto, a los 30 años nuestro programa genético comienza a deteriorarse, cambia la fisonomía, aumentamos de peso, el cerebro deja de retener tantos recuerdos como antaño y dejamos de dormir como auténticos bebés. estos cambios se dan paulatinamente pero siempre en retroceso.
Es por ello que, al llegar a la treintena, no solo hay que preocuparse por saber cómo envejecer sano, sino también por afrontar el paso de los años, mantener viva la belleza, seguir gozando al máximo del sexo y conocer algunos consejos para afrontar el paso del tiempo, ya que, aunque una persona de 30 años continúa siendo muy joven, es fundamental empezar lo antes posible a cuidar el cuerpo para permanecer hermosas y enérgicas durante muchos años.
Muchas frutas y verduras
Consumir frutas y verduras a diario es genial para permanecer jóvenes durante mucho tiempo, ya que estos ingredientes están plagados de vitaminas que mejoran el estado de la piel, fortalecen el sistema inmunológico y aportan grandes dosis de energía. Así que, si acabas de cumplir 30 años, no te olvides de incluirlos en tu dieta diaria.
El poder de los antioxidantes
Para conseguir que tu belleza dure muchos años, procura que en tu dieta no falten los antioxidantes, unas moléculas que evitan que el paso de los años pese sobre nosotros y que están presentes en los cítricos, naranjas, sabrosas papaya, las fresas, el kiwi, las uvas, el melón, el té, las cerezas o el ajo, entre otros muchos alimentos.
Hacer ejercicio
Si quieres estar en forma, lucir un cuerpo diez y quitarte varios años de encima, te invitamos a que empieces ya mismo a hacer ejercicio diariamente como una forma cotidiana de vida. Puedes salir a correr, nadar, apuntarte a clases de baile o jugar a pádel. ¡Todo vale!